Tras más de 40 años de trabajo, reflexión, investigación y conferencias que han reunido a una gran variedad de agentes de la movilidad urbana en países emergentes y en desarrollo (responsables políticos, profesionales, investigadores, expertos, donantes, ONG, etc.);
Tras la «Declaración de Lomé de CODATU» en 2002, en la que se proponen principios y acciones para orientar las políticas de movilidad urbana, y la Declaración de CODATU en la Cumbre Mundial de Hábitat III sobre «la accesibilidad que necesitamos»;
Ante los considerables retos que tienen por delante las ciudades del Sur en relación con las transiciones urbanas, energéticas y digitales, las transformaciones sociales, la resiliencia al cambio climático, la metropolización, la globalización y las pandemias;
Constatando que la movilidad urbana se ha convertido en un problema prioritario para las ciudades del Sur y que los poderes públicos locales y nacionales están llamados a abordarlo, incluso hasta el punto de socavar las propias instituciones, y convencidos de que la movilidad urbana es un componente esencial de la lucha contra el cambio climático y la importante contaminación que se registra en todas las zonas urbanas;
Dada la urgente necesidad de aprovechar la experiencia de las ciudades que se enfrentan desde hace tiempo a los problemas de la movilidad, para evitar repetir los errores del pasado y adoptar políticas públicas eficaces y virtuosas, es necesario aplicar políticas públicas bien conocidas: planificación de la movilidad integrada en el desarrollo urbano, centrada en las personas y sus necesidades, limitando el papel del automóvil; refuerzo de las instituciones y del sistema de coordinación entre los actores implicados en la ciudad; búsqueda y aplicación de un modelo de financiación sostenible para el transporte público, que necesita un desarrollo constante; inversión integrada en una visión multimodal de la movilidad, teniendo en cuenta los modos activos de transporte y la contaminación urbana; el reconocimiento del papel del transporte a pequeña escala y la integración de los operadores profesionales en un sistema multimodal; la creación de observatorios locales que proporcionen datos básicos sobre la movilidad; tener en cuenta la necesidad de seguridad personal y de género en el sector del transporte profesional y la lucha contra el acoso sexista y sexual;
Convencidos de que la movilidad urbana, tanto de personas como de mercancías, es un componente esencial en la lucha contra el cambio climático, en consonancia con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 °C, y en la limitación de la importante contaminación que se registra en todas las zonas urbanas.
La siguiente hoja de ruta fue adoptada por CODATU al término de la Conferencia celebrada en Dakar del 3 al 7 de octubre de 2022. Válido para la próxima década, el plan de acción propuesto será supervisado por un observatorio creado inmediatamente por CODATU y sus socios. Su objetivo será supervisar la aplicación de todas las recomendaciones sobre el terreno.
